El Obispo de la Diócesis de Victoria, Antonio González Sánchez, afirmó que ante el repunte de la violencia y la inseguridad en varios municipios del Estado, a los ciudadanos no les queda más que orar a Dios para que regrese la paz a Tamaulipas y al resto del país.
Recordó que los obispos del país elaboraron una oración en la que se pide especialmente por la seguridad de México e incluso, por los que causan daño, dolor y sufrimiento a sus semejantes, y es una oración que la Diócesis replica en sus parroquias
Comentó que los gobernantes, de todos los niveles, pueden emplear estrategias que ellos consideran adecuadas para combatir la violencia pero en realidad el único que podrá frenar o detener este clima de inseguridad es Dios.
“En los últimos días ya tenemos muchos años, no nos queda otra más que orar en la oración por la paz que elaboraron los obispos de México dentro de ella se pide por los que causan daño y no nos queda otra que orar el único que puede solucionar esto es el buen padre de Dios ojalá que los gobernantes de todos los niveles le ayuden a Dios pero el único que puede solucionar esto es él”.
Por ello reiteró el exhorto a la población en general y a los católicos en particular para que dediquen diariamente unos minutos para orar por la paz sobre todo en esta temporada de Semana Santa en la que la muchos ciudadanos eligen vacacionar en lugar de ayunar, orar y hacer buenas obras.
“Sí bueno yo sé que la propaganda, los medios de comunicación hablan mucho de la semana santa como una semana de vacaciones, pero yo espero que la gente no se aleje de la Iglesia ni de las cosas de Dios”.