Más de 2 mil 800 mexicanos murieron tratando de cruzar la frontera con Estados Unidos en los últimos 10 años, de acuerdo con el estudio “Amenazas a los derechos civiles e incremento en la hostilidad social que enfrentan las personas migrantes”, elaborado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y la Universidad de California.
Sin embargo, el estudio señala que los 2 mil 837 casos registrados no son el total de personas migrantes que han muerto por cruzar la frontera, pues no existen reportes acerca de los cuerpos que son encontrados por agentes no fronterizos o civiles, que podrían estar relacionados con este fenómeno.
Las cifras oficiales recabadas en el documento muestran que, en los últimos 10 años, el número de migrantes fallecidos en su intento por cruzar la frontera disminuyó un 60.98 %, al pasar de 369 a 144.
2015 y 2014 fueron los años con el registro de muertes más bajo, con 166 y 221 fallecimientos, respectivamente; sin embargo, para 2016 el número se elevó a 316, y para 2017 disminuyó a 272.
De acuerdo con la investigación, la idea de construir obstáculos en la frontera entre los Estados Unidos y México -como el muro propuesto por el presidente Donald Trump- no es algo nuevo, y se ha replanteado desde la década de los 90, aunque con el aumento de agentes de la patrulla fronteriza se ha incrementado el número de agresiones contra migrantes.
Estadísticas del uso de fuerza de la U.S. Border Patrol señalan que, entre 2012 y 2017 el número de ocasiones en las que los agentes utilizaron armas de fuego o no letales contra migrantes se incrementó en un 7.33 %, al pasar de 928 a 996.
En el caso del uso de armas de fuego, el número de ocasiones en que los oficiales reportan haberlas utilizado contra migrantes disminuyó 69 % en el mismo periodo, al pasar de 55 a 17.
El uso de armas no letales como tasers para dar choques eléctricos y bastones, utilizado en el 89 % de los incidentes contra migrantes, ha incrementado un 12.14 %, pues en 2012 se registraron 873 casos, y para 2017 fueron 979.
Agresiones a migrantes en la era de Trump
El estudio señala que en 2017, el 13 % de las personas migrantes con nacionalidad mexicana en Estados Unidos reportó haber sido víctima de alguna agresión o acto hostil, lo que la Universidad de California y la CNDH atribuyen al discurso antimigrantes impulsado por el presidente Trump.
Las principales formas de agresión que han sufrido son detenciones injustificadas, amenazas de llamar a autoridades migratorias, abusos físicos y verbales, que les digan que regresen a México, prohibición de hablar en español y que les impidan la entrada a algunos sitios como restaurantes y centros comerciales.
En el caso de los crímenes de odio cometidos contra latinos, el documento señala que estos se incrementaron en 24 % entre 2016 y 2017.
Acerca de las deportaciones masivas, el reporte señaló que, de las 433 mil personas deportadas en 2016 por los Estados Unidos, 308 mil fueron mexicanas, y el 15 % de ellos experimentó discriminación por parte de las autoridades estadounidenses, así como maltrato físico y psicológico.
Estas personas reportaron que, durante su detención, fueron privadas de tomar agua o de alimentos, estuvieron expuestas a temperaturas extremas de frío o calor, estaban en celdas con hacinamiento por el número de detenidos, además de que habían hombres y mujeres mezclados en los espacios asignados.
También señalaron que no había baños ni servicio médico y que, en ocasiones, debían compartir celda con delincuentes peligrosos.