Regresarán a sus cuarteles en el Ejército Mexicano un total de 7 mil 612efectivos de élite, porque el proyecto de Andrés Manuel López Obrador es prescindir de ese cuerpo de seguridad.
Ellos son elementos del Estado Mayor Presidencial (EMP), del Cuerpo de Guardias Presidenciales (CGP), así como de un batallón de marinos conocido como (24 BIM) que están al servicio del presidente.
Unos 8 mil 47 elementos integran el Estado Mayor Presidencial (EMP): 7 mil 612 son de las Fuerzas Armadas, 52 son policías federales y de la Ciudad de México y 383 son civiles.
La decisión de que los efectivos regresen a sus cuarteles está dando de qué hablar en las filas castrenses.
«La mayoría de los elementos militares que integran todo el EMP cuentan con un adiestramiento de élite, técnicas contra terrorismo, atentados y protección de servidores públicos; cuentan con su propio sistema de inteligencia y contrainteligencia”, comentó a Reforma un mando castrense de la Primera Zona Militar.
«Tenerlos de regreso a las filas del Ejército será una buena noticia. Ellos son militares y deben ajustarse a cualquier misión», apuntó.
Benito Jiménez destaca en su nota que la plantilla asignada al servicio del Presidente supera en número a los desplegados en estados azotados por el crimen organizado.
Consultados por el mencionado rotativo sobre la reintegración de elementos del EMP a los cuarteles del Ejército, de la Armada y la Fuerza Aérea, mandos militares coinciden en que las Fuerzas Armadas serán fortalecidas con personal altamente capacitado.
Pero también hay descontentos. Militares consultados difirieron con la integración del EMP a tareas distintas a las que han venido desempeñando y los integrantes de este cuerpo han mostrado preocupación sobre sus nuevas tareas.
De acuerdo con el general de División retirado, Luis Garfias, este cuerpo de élite debería de continuar en funciones al servicio del Presidente en turno.