Por unanimidad, con 87 votos, el Pleno del Senado aprobó la expedición de la Ley General de Economía Circular, que regulariza a los pepenadores, obliga al reciclaje y reduce al méximo la generación de residuos.
Impulsado por los senadores Ricardo Monreal y Raúl Bolaños Cacho, el ordenamiento pretende reducir el impacto ambiental derivado de las actividades económicas, minimizando el desperdicio de materiales y disminuyendo el consumo de materias vírgenes a través de la reutilización, el reciclaje y el rediseño.
El proyecto aprobado busca disminuir la generación de los residuos y su carga contaminante para minimizar el impacto en el medio ambiente y la salud humana.
Con el nuevo ordenamiento se procurará que aquellos residuos que no puedan ser valorizables o integrados en el ciclo productivo sean dispuestos sin deteriorar el medio ambiente.
Además, impulsará e implementará el desarrollo tecnológico para el reciclaje, la reutilización y el rediseño de productos basado en un esquema de economía circular para reducir la entrada de los materiales vírgenes como la producción de desechos.
Tras la aprobación de ese proyecto, los senadores se enredaron en la discusión de la ley para eliminar los plásticos de un solo uso, que nada más pudo aprobarse en lo general en razón de que Morena reventó el quórum.
La senadora panista Xóchitl Gálvez subió a tribuna para denunciar que «alguien» había hablado a la Cámara alta para retirar una reserva previamente consensuada para que en los municipios con avances importantes en materia de eliminación de plásticos de un sólo uso no se revirtiera.
«Yo pensé que al PAN lo mandaban los empresarios y resulta que no», ironizó.
«Yo estuve recibiendo muchas presiones de la industria y los mandé al diablo porque aquí en el Senado no legisla la industria», sostuvo ante la protesta de varios morenistas.
«¿Por qué se bajó la reserva? Porque de verdad le dolió a algunas empresas ese tema y seguramente cabildearon. No tengo otra explicación para ese tema».
La discusión se enredó después de que el senador Bolaños Cacho, del Verde Ecologista, afirmó que «hubo inquietudes de última hora que la mayoría definió para que una reserva no fuera admitida.»
Luego se presentó un fe de erratas para generar un nuevo acuerdo que abonara a la legislación que se discutía.