Un impala logró escapar de las mortales fauces de un cocodrilo pero poco después terminó devorado por un leopardo en el Parque Nacional Kruger, en Sudáfrica. El ataque fue grabado por una pareja de turistas y las imágenes fueron publicadas recientemente en el portal Kruger Sightings.
«Estábamos viendo una manada de impalas bebiendo en un gran estanque de lodo que se había formado junto a la carretera tras las fuertes lluvias […] Nos detuvimos para observar más de cerca un impala con un pata rota. De repente, un cocodrilo de 4 pies (1,2 metros) salió inesperadamente del agua y agarró al impala, lo arrastró al agua fangosa y lo sumergió», comentó Angela y Craig Weeks, quienes visitaron la zona hace unas semanas.
Tras el primer ataque, el antílope luchó por salir a la superficie durante un par de minutos y posteriormente pudo liberarse. Sin embargo, mientras el cocodrilo atacaba a su presa, «la manada de impalas estaba emitiendo una ‘señal de alarma’ muy fuerte», que, según la pareja, «era básicamente una llamada para que cualquier depredador de la zona se alimente».
En este caso, la «llamada» fue escuchada por un leopardo que «se acercó para ver si eso significaba comida gratis para él», sugirieron los turistas. Finalmente, el gran felino atrapó al impala y arrastró su cadáver para devorarlo en un escondite.