En el estado australiano de Nueva Gales del Sur, un tiburón blanco gigante se acercó a una distancia más corta de lo deseable de Matthew Smith, un joven que estaba pescando en una pequeña canoa a un kilómetro y medio de la costa en Black Head Beach, informó el lunes 9News.
Parte del encuentro fue filmado por su amigo, Nick O’Brien, que desde la playa operaba un dron con el que filmó la angustiosa escena. El video muestra a un tiburón de cuatro metros nadando alrededor de la pequeña embarcación. El escualo parecía especialmente atraído por el ancla de la canoa, por lo que Smith decidió arrojarla por la borda para que el depredador perdiera interés en él. Afortunadamente la estrategia dio resultado y el animal acabó alejándose.
Últimamente en Australia han aumentado los ataques de tiburones. En lo que va de año se tiene constancia de 21 agresiones y siete víctimas mortales, unas cifras que suponen un récord de 86 años.