El Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya «rechaza rotundamente» las acusaciones expresadas por expertos de falta de fiabilidad de los datos estadísticos de la vacuna rusa contra el coronavirus Sputnik V, tras su publicación en la revista científica The Lancet, ha declarado este jueves el subdirector del departamento científico de la institución, Denís Logunov.
«Estos datos también pasaron un examen exhaustivo de los revisores de la revista, quienes, antes de la publicación, hicieron todas las preguntas necesarias con respecto al contenido del artículo y los datos en los que se basó, y recibieron respuestas completas», aseguró el especialista, agregando que el Centro Gamaleya había proporcionado un protocolo clínico completo a la editorial de The Lancet.
En sus comentarios anteriores, Logunov había subrayado que «los datos publicados son confiables y precisos«.
Las declaraciones se producen después de que este lunes un grupo de investigadores de universidades estadounidenses e italianas, entre otras, publicaran una carta abierta dirigida a los autores del estudio en la que señalaban que algunos de los experimentos descritos en el artículo, según su opinión, presentaban anomalías estadísticas.
Por su parte, los representantes de la editorial instaron a los creadores del fármaco a «participar en la discusión científica» y según ha comunicado este jueves el asistente del ministro de Salud ruso, Alekséi Kuznetsóv, el Centro Gamaleya ya ha mandado «respuestas detalladas» a la revista médica.
Sputnik V
La vacuna rusa Sputnik V contra el covid-19 fue desarrollada por el Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya. Los resultados de los ensayos clínicos de las fases 1 y 2 fueron publicados el pasado 4 de septiembre en The Lancet.
Los desarrolladores de la vacuna señalan en la publicación en la revista que el 100 % de los participantes desarrolló una respuesta inmunitaria humoral y celular estable durante las fases 1 y 2 de los ensayos.
Al mismo tiempo, el nivel de anticuerpos contra el SARS-CoV-2 en los voluntarios vacunados con Sputnik V fue de 1,4 a 1,5 veces más alto que el nivel de anticuerpos en los pacientes que se habían recuperado del covid-19.