Alrededor de 10 mil migrantes extranjeros están dispersos en la frontera de Tamaulipas, lo que representa un riesgo por la emergencia sanitaria, aseguró Gloria Garza Jiménez, Subsecretaria de Gobierno.
“Los que están en los albergues están perfectamente identificados, entonces es otro número, los 10 mil son los que no sabemos si cruzaron de manera ilegal o se quedaron en el Estado”, explicó.
Garza Jiménez detalló que ante este problema le pidieron al Instituto Nacional de Migración (INM) que si se iban a quedar en el país no fuera en la frontera donde causan un problema mayor, a lo que se suma la emergencia sanitaria que vive el país.
“Se ha venido sumando al reclamo del Estado a la Federación a que tome cartas en el asunto porque si bien el gobierno federal pudiera estar haciendo un esfuerzo, como delegación no le alcanza porque no hay decisiones que se tomen en la oficina central y siguen recibiendo extranjeros”, subrayó.
Garza Jiménez comentó que el otorgamiento de refugio humanitario está parado por el momento y no les van a dar una cita a los migrantes, “no tiene caso que estén en la frontera cuando si no obtienen el permiso los van a retornar a su país”, dijo.
Explicó que en julio 11 del año pasado empezó el programa de protección al migrante, con un acuerdo entre México y Estados Unidos, presentándose un mayor flujo de migrantes de esa fecha a diciembre pasado.
“Este año ha sido menor el flujo hacia el norte, creemos que tiene mucho que ver el tema de la enfermedad Covid-19, el problema es que entraron más de 13 mil en el programa de espera en su cita, y de ellos 10 mil no están localizados”.