Quizá no te ha pasado, pero es casi 100% seguro que al menos una vez has oído a alguien decir que se le subió el muerto. Aunque parezca que este acontecimiento casi sobrenatural es poco común, las investigaciones señalan que al menos a 3 de cada 10 personas les ha pasado una o más veces.
La tendencia es que ocurra a pacientes con más de 20 años de edad, sin embargo, prácticamente a cualquiera le puede pasar.
¿Por qué se te “sube el muerto”?
Muchas veces, a esta condición nada agradable se le dan diversas explicaciones paranormales, pero la realidad es que tiene una razón científica. Se trata de una trastorno que recibe el nombre de parálisis del sueño.
Para entender por qué se da, primero hay que conocer un poco sobre las dos fases cíclicas que se repiten aproximadamente cada 90 minutos mientras dormimos.
La primera fase se divide en 4 etapas:
– Adormecimiento: Son los primeros diez minutos del sueño. En esta etapa pasamos del estado de vigilia al adormecimiento.
– Sueño ligero: Esta es una de las más importantes pues ocupa aproximadamente la mitad del tiempo que pasamos dormidos. En estos momentos la respiración y el ritmo cardiaco se vuelven más lentos. Es aquí cuando suele suceder que despiertes repentinamente de un sueño que te causa sobresalto, por ejemplo: cuando crees que vas cayendo en un precipicio.
– Transición: Es una etapa breve que dura entre dos y tres minutos y representa la entrada al sueño profundo.
– Sueño profundo: Este ocupa una quinta parte de cada ciclo de sueño. A pesar de que parece corta, de esta depende la calidad del descanso.
La segunda fase es conocida como de movimientos oculares rápidos (MOR) o sueño rápido. En ella se desarrollan los sueños y mientras la pasamos, los músculos que movemos de forma consciente cuando estamos despiertos, están prácticamente apagados.
De cada 80 minutos del sueño, está ocupa 22.5 minutos, aproximadamente.
En MOR, el cerebro trabaja casi tan rápido como cuando no está dormido, sin embargo, el cuerpo no lo hace y es así que experimentamos la parálisis del sueño.
Cuando “se te sube el muerto”, sucede que por alguna razón despiertas repentinamente antes de que termine la fase MOR. En consecuencia, tu cerebro despierta, pero no completamente, mientras el cuerpo permanece paralizado así que no puedes moverte ni hablar ni gritar ni despertar del todo.
Este incómodo estado puede durar de 2 a 10 minutos y siempre es pasajero, desafortunadamente, cuando estás experimentándolo, no tienes forma de saberlo.
No es común que la parálisis del sueño ocurra continuamente, pero hay algunos factores que hacen a las persona más proclives a ellas:
– Falta de sueño.
– Viajes que impliquen un cambio de zona horaria.
– Cambios en los hábitos de sueño.
– Narcolepsia; ataques de sueño.
– Depresión.
Con información de Muy Interesante.