A sus 75 años, el rockero Ozzy Osbourne se encuentra batallando desde hace algunos años contra la enfermedad de Parkinson, problemas de cuello y espalda. Sin embargo, esto no le quita las ganas de seguir drogándose de vez en cuando.
Así lo confesó el vocalista de Black Sabbath en el podcast Madhouse Chronicles, donde reconoció que no ha podido mantenerse sobrio al cien por ciento, pese a luchar contra las adicciones casi toda su vida.
«Estoy más feliz, pero no estoy completamente sobrio. Consumo un poco de marihuana de vez en cuando», señaló el británico, quien últimamente depende de una silla de ruedas y muletas para moverse, a raíz de sus problemas de salud.
«Tengo suerte de que mi esposa me patee el trasero todo el tiempo y me haga la vida muy difícil. Incluso con marihuana, la encontrará y se deshará de ella».
En la entrevista, Ozzy habló sobre cómo Sharon, su esposa, lo vigila todo el tiempo, algo que él agradece, en especial cuando se le ha antojado últimamente usar drogas más fuertes que la marihuana.
«Fui al médico hace poco y comencé a tomar ketamina. Me puso una pequeña cantidad, pero fue suficiente para que me despertara. Esa sustancia me golpeó y me hizo sentir un peso en el cerebro».
También compartió que ya dejó de asistir a las juntas semanales de Alcohólicos Anónimos, algo de lo que se arrepiente.
«Si estás ahí fuera y consumes drogas y quieres dejarlas, hay mucha gente que te ayudará (a consumir). AA es un programa de 12 pasos. Me ayudó a solucionarlo hasta cierto punto, pero ya no voy a las reuniones. Tal vez debería hacerlo de nuevo, no lo sé», reconoció Ozzy.