Vo Van Thuong se convirtió este jueves a sus 52 años en el presidente más joven de la historia de Vietnam tras ser elegido por la Asamblea Nacional para sustituir a Nguyen Xuan Phuc, quien dimitió en enero por prácticas corruptas ocurridas bajo su mando.
Thuong, nominado la víspera por el comité central del Partido Comunista, marca un cambio de tendencia respecto a los anteriores mandatarios, que superaban los 65 años.
Pese a su juventud, Thuong, nacido en la provincia sureña de Vinh Long, es un veterano en el Partido Comunista, en el que ingresó en sus tiempos universitarios y en el que ocupaba el destacado cargo de secretario permanente hasta su ascenso a la presidencia.
El nuevo jefe del Estado es también el miembro más joven del Politburó -el máximo órgano dirigente del partido- y es percibido por los expertos como un hombre cercano al secretario general de la organización, Nguyen Phu Trong, de 79 años.
Sustituye en el cargo a Nguyen Xuan Phuc, quien dimitió el pasado 17 de enero por la implicación de sus antiguos subordinados en escándalos de corrupción y había sido reemplazado de forma interina por la vicepresidenta Vo Thi An Xuan.
En una ceremonia en la Asamblea Nacional vietnamita, reunida en sesión extraordinaria, Thuong prometió su «lealtad absoluta» a la constitución de la República Socialista de Vietnam en el ejercicio de su nuevo cargo, que le otorga la máxima representación del Estado dentro y fuera de Vietnam y el mando de las fuerzas armadas, detalló el Gobierno en un comunicado.
Thuong no partía como favorito en las quinielas de los analistas tras la dimisión de Phuc, pero en las últimas semanas su nombre fue ganando fuerza por su juventud y por ser percibido como cercano a Trong, hombre más poderoso del partido y de Vietnam en la última década.
El nombramiento de Thuong se interpreta como un refuerzo de Trong, que en el Congreso del Partido celebrado hace dos años no pudo colocar en la jefatura del Estado a ninguno de sus colaboradores más próximos.
La presidencia recayó entonces en Phuc, que llegaba con la vitola de su buena labor como primer ministro en la gestión de la pandemia de covid-19 y que dos años después tuvo que dimitir por la implicación de altos cargos de su gabinete en un escándalo de sobornos.
Su dimisión se enmarca dentro de la campaña anticorrupción sin precedentes liderada por Trong, desde hace siete años y que se ha llevado por delante a altos cargos políticos y empresariales que en otras épocas hubieran parecido intocables.
La inminente retirada de Trong (probablemente en el Congreso del Partido Comunista en 2026 a no ser que su frágil salud la adelante) había planteado dudas sobre la continuidad de esta campaña, que podría mantenerse si sus colaboradores más cercanos, como Thuong, ganan fuerza.
Aunque la presidencia del país es un cargo con menos poder que el de secretario general del Partido Comunista o el primer ministro, coloca a Thuong en primera línea de cara a una posible sucesión de Trong al frente del partido en el Congreso de 2026.