El Vaticano aceptó la renuncia del Obispo de Ciudad Victoria, Antonio González Sánchez quien en el mes de febrero del presente año se vio envuelto en una polémica con respecto al uso de cubrebocas al afirmar en uno de sus sermones que quien lo utilizaba “No confiaba en Dios”.
Mediante un comunicado avalado por el Papa Francisco, se indica que a petición del involucrado, se acepta su separación del cargo tras permanecer en el mismo varias décadas en la Diócesis de la capital de Tamaulipas.
En la ceremonia, González Sánchez señaló que si bien el uso del cubrebocas era indispensable para evitar la propagación del virus, también era una duda la confianza que se tiene en Dios.