El fuego que caía del cielo dejando una larga estela luminosa generó gran temor de los residentes del poblado Lázaro Cárdenas, poblado cercano a Ciudad Victoria, Tamaulipas quienes creyeron que era el fin del mundo.
Al parecer se trataron de fragmentos de un meteorito, que al ingresar a la atmósfera se encendieron y precipitaron contra la superficie de este poblado rural conocido también como “El Rancho del Olvido”, localizado a escasos cinco minutos de Ciudad Victoria, capital de Tamaulipas.
«La gente pensó que era el fin del mundo, los niños lloraron, es que la luz se vio bien cerca», declaró a El Sol de Tampico, Leticia Hernández Alvarado, representante de este ejido donde viven 382 personas.
Alejados de las creencias de extraterrestres y hechos sobrenaturales, los habitantes de este lugar dicen estar sorprendidos de que en el incendio provocado por la caída de estas piedras quemó desde su raíz un árbol conocido como «nacagua», que aseguran es resistente al fuego.
«La nacagua se quemó desde su raíz, esos árboles sobreviven siempre a los incendios por eso la gente está sorprendida, esto no es normal», detalló.
Es la primera vez que ocurre algo tan sorprendente en este lugar donde por igual curiosos, periodistas, geólogos y autoridades llegaron al sitio «esto nos pone en el mapa, no existíamos, tal vez no es tan malo, quizá esto es una bendición del suelo», señaló.
El director de Protección Civil en Ciudad Victoria, Julio César Cantú informó que, se recolectaron unos 250 gramos de piedras que serán enviados a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Al ser cuestionado sobre la probabilidad de que exista algún riesgo por radiación, dijo que se tendrá que analizar, pero que normalmente las rocas que hacen contacto con nuestro planeta no tienen este tipo de radiación.¡