El príncipe Harry ha repuesto 2,4 millones de libras esterlinas (3,2 millones de dólares) de dinero de los contribuyentes británicos que fue usado para renovar la casa en Windsor que iba a ser habitada por él y su esposa Meghan antes de que renunciaran a sus deberes reales y se mudaran a California.
Un vocero de la familia dijo el lunes que Enrique hizo una contribución al Fondo Soberano, el dinero público que es destinado a la familia real. Dijo que la contribución ‘cubre completamente los costos necesarios de renovación de Frogmore Cottage’, cerca de la casa de la reina Isabel II en el Castillo de Windsor al oeste de Londres.
El vocero dijo que Frogmore Cottage seguirá siendo la casa de Enrique y Meghan, el duque y la duquesa de Sussex, cuando estén de visita en Gran Bretaña.
Según las cuentas reales de 2019 cerca de 2,4 millones de libras esterlinas fueron usados para remodelar la casa, incluyendo obras estructurales, nuevo cableado y nuevos pisos. Enrique y Meghan accedieron a devolver el dinero y comenzar a pagar renta como parte de los planes que se crearon cuando renunciaron a sus deberes como miembros prominentes de la familia real en marzo.
Recientemente compraron una casa en Santa Barbara, California y la semana pasada anunciaron un acuerdo con Netflix para producir películas y series para el servicio de streaming.