Una vecina de la prefectura japonesa de Aichi encontró en su casa los restos de su hermano desaparecido mientras arreglaba la habitación del difunto, informa el diario Japan Today.
Sumio Suenaga tenía 66 años cuando desapareció en 2015. Vivía en su casa junto a sus dos hermanos menores, que habían reportado su desaparición a la Policía en 2016. Sin embargo, el pasado fin de semana, la hermana del hombre desaparecido decidió limpiar la habitación de Sumio, en la que, al parecer, no había entrado en los últimos cinco años.
En la habitación, la mujer, de 69 años, descubrió un cuerpo esqueletizado sin ropa. «Encontré algo que creo que son huesos humanos», denunció a la Policía. Los agentes que acudieron al lugar confirmaron que se trataba de restos humanos y, aunque no pudieron determinar la edad ni el sexo del individuo, creen que podría tratarse del cuerpo de Sumio.
Se desconocen las causas y circunstancias de la muerte. Los familiares del difunto indicaron en el informe de desaparición que Sumio salió un día de casa y que no se supo más de él. El periódico describe la situación de «sorprendente» y «desconcertante», debido a que los familiares pasaron años cerca del cadáver de su hermano en una casa que no es grande.