El coordinador de Maestros Por México, Ricardo Aguilar Gordillo, consideró que las amenazas, presiones, retenciones de sueldos y hasta despidos injustificados a los docentes que han manifestado públicamente su apoyo a la maestra Elba Esther Gordillo Morales, estos últimos no dejan de repudiar a la actual dirigencia de Alfonso Cepeda Salas.
“En todo el país, creyeron ellos, que con el solo hecho de moverlos, quitarlos de su centro de trabajo, amenazarlos, correrlos, los que son miembros de comités delegacionales, de comités seccionales, quitarlos y quitarles su salarios iban a lograr detener callar silenciar a tantos compañeros que son militantes de maestros por México”.
Afirmó que quienes están al frente del SNTE han recurrido a todo tipo de prácticas para intimidar a los maestros en todo el país pero lejos de atemorizarlos y callarlos, lo que están logrando es que los trabajadores de la educación se sumen a Maestros por México.
“Lo único que lograron fue motivar mas la inconformidad de tal suerte donde incluso quisieron hacer cambios de comités seccionales, de comités delegacionales la gente se empezó a rebelar, la gente está votando en contra de ellos, su tiempo se acabó deben entenderlo hoy son nuevos tiempos, profundamente hay un sentimiento desde el magisterio nacional de molestia inconformidad y de descontento”.
Esta reacción contraria a sus pretensiones, agregó, ha molestado a Cepeda Salas y sus simpatizantes que no ven la forma de detener ese cambio sindical que la base reclama porque los maestros exigen liderazgos que los defiendan y protejan sus intereses y no que les den la espalda como ocurre en la actualidad.
“Muchos fueron corridos bajo el supuesto de que no estaban con la actual dirigencia del SNTE a pesar de eso la reacción fue contraria a sus pretensiones porque nos dimos cuenta que en todo el país la gente está volcada a un cambio y a la renovación de las practicas que se han dado en este sindicato, ellos están con la gente que los cuida los defienda y que se ponga al frente de sus preocupaciones no que le dé la espalda”.
