El gobierno federal aseguró que el programa de Estancias Infantiles seguirá operando, pero con la reducción de “gastos excesivos”, y a través de una nueva estrategia nacional que será coordinada entre las instituciones de salud y los gobiernos locales.
En comunicado, el gobierno mexicano expuso que el nuevo esquema “cumplirá cabalmente lo estipulado en la Ley General de Prestación de Servicios para la Atención, Cuidado y Desarrollo Integral Infantil atendiendo el principio de interés superior de las niñas y los niños”.
Aunque no dio detalles de los nuevos lineamientos, el gobierno afirmó que regularán las estancias de tal manera que “puedan operar bajo estándares de máximo cuidado y bienestar para las niñas y los niños”.
También defendió el recorte a las estancias, al argumentar que había un trato discrecional en las asignaciones; falta de atención a sectores prioritarios de la población; cobros indebidos y actos de corrupción señalados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Detalló que en una auditoría de desempeño, la entonces Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) no acreditó la debida admisión de más de 300 estancias, tampoco atendió, según la auditoría, a la población objetivo; ni acreditó la capacitación de más de 20 mil responsables de estancias, así como la documentación para la entrega de subsidios en 659 estancias (7 % del total).